Saturday, March 10, 2012

Andrew Weil

A esta persona la conocí durante mi solitaria estancia en Winston-Salem, en eso días cuando las cosas se veían más difíciles de lo que realmente son. Durante la época en la que pasaba muchas horas encerrada en mi cueva preferida, rodeada de libros polvorientos, de luz blanca contrastante con sombras y de silencio, ese silencio que tanto disfruté y que ahora intento reencontrar.

Este señor compartió conmigo su libro "The Healthy Kitchen" y con él me permitió sentir un poco de felicidad y tranquilidad. Llenó mi mente de ideas saludables que se han empeñado a vivir conmigo a pesar de que las combato con scones y helado.

Este señor se convirtió en mi amigo, como tantas otras cosas inanimadas lo han sido a lo largo de mi soledad. Es curioso ahora volverlo a ver, con la misma sonrisa de siempre y con tremenda naturalidad. Es satisfactorio saber que hay cosas que no cambian, o al menos parecen no cambiar.

Thursday, February 25, 2010

Escribir por escribir

Tengo que cumplir la fecha límite para dos aplicaciones, la cual es mañana, y aún así no me convenzo a mí misma de lo inminente que es el momento. Muchas veces me ha pasado lo mismo, supongo que de ahí viene esta “seguridad en mí misma” que se refleja de momento en inspiración, proveniente de algún lugar profundo en mi mente, que parece fluir con cada palabra que plasmo en éste ciberespacio (ésta palabra es tan graciosa). Escribir por escribir, creo que ese es mi estilo. Escribir lo que pienso y lo que siento sin medir o juzgar, algunas veces olvido que esa es la manera más divertida de hacer las cosas, o sólo debería decir, de escribir.


Para ya no olvidar que no existe presente,

Para ya no sentir el dolor de pensar,

Yo prefiero escribir y decirle a la gente

las palabras que así, ya no tendré que hablar.